GP de Australia

16 DE MARZO 2008 - 05:30 HORAS (REPETICIÓN A LAS 16:00 HORAS) El trazado de Albert Park es de los denominados "stop-start": apenas hay combinaciones de curvas rápidas, y sí muchas chicanes y curvas lentas unidas por rectas relativamente largas. Lo que significa que un buen rendimiento del motor y una buena tracción para salir de los giros son factores clave para lograr buenos tiempos. En términos de reglajes, se usa una carga aerodinámica media/alta y una suspensión tirando a rígida para lograr un buen comportamiento en los numerosos cambios de dirección.

Pero al ser un circuito no permanente, las zonas de frenada están bacheadas, con lo que un reglaje demasiado rígido puede hacer que el piloto bloquee las ruedas al pisar el pedal, con la consiguiente pérdida de tiempo y deterioro de los neumáticos. Y hablando de frenadas: hasta en seis ocasiones a lo largo de la vuelta los coches deben decelerar desde los 300 km/h. No son la más brutales de la temporada, pero el hecho de que estén repartidas regularmente hace que haya que prestar especial atención a la refrigeración de los frenos.
Otro condicionante del fin de semana es la evolución en las condiciones de la pista. El desgaste de los neumáticos, sobre todo los delanteros, es bastante alto el viernes, ya que los niveles de subviraje son más altos de lo normal en un asfalto aún sucio. La situación va mejorando según se va depositando goma sobre la pista, y al llegar la carrera lo normal es que se equilibre el nivel de desgastede los ejes delantero y trasero.